jueves, 30 de mayo de 2013
Más que un profesor es un amigo (continuación):
Se acercaban los últimos días de Septiembre. El curso estaba empezando.
Por ese tiempo mi abuela cayó con una enfermedad bastante grave, que la llevó a estar durante unas semanas en el hospital.
Yo estaba bastante sensible, ya que mi abuela, significa mucho en esta vida para mí, es una de las mejores personas que conozco, siempre con una sonrisa en la cara aunque ella este mal, siempre tiene una sonrisa en su rostro, ya arrugado por la edad pero lleno de alegría.
Un día de ellos, por circunstancias del momento me paso algo bastante inoportuno en el instituto, que hizo que explotase llorando. Coincidía en unos días que mi abuela estaba bastante grave y claro, por alguna parte tenía que explotar.
Cuando me dirigía hacia el hospital a ver a mi abuela por la calle, yo lloraba bajo las gafas oscuras de sol (aunque intentaba que no se notase), y vi a A. frente a mi, yo en ese momento me sequé las lagrimas lo más rápido posible para que no notara que estaba mal.
Se paró a saludarme y con tan solo decirle un simple -hola- ya supo que me pasaba algo. A. realmente me conocía.
Él me invitó a tomar un café para que le explicara todo lo que pasaba y me tranquilizara un poco.
Durante el tiempo que estuve con A. a su lado, contándole lo que me pasaba, él me aconsejó (como gran sabio que es), me dio abrazos sentidos, en los cuales note su fuerza de sentimiento y besos diciendo "tienes que seguir hacia delante, que tu puedes, sabes que me tienes aquí".
Desde ese día, nuestra relación profesor-alumna cambió y se convirtió en amigo-amiga.
Durante todo este año, hemos estado hablando mucho, sobre mi futuro universitario, me ha dado consejos, se ha preocupado por mi, preguntándome todas las mañanas a las 8:30 qué tal estaba; incluso el día que me fui a examinar del carnet de conducir me envió un e-mail para que me acordase de él y me relajase cuando estuviese subida en el coche.
Hoy es uno de mis últimos días en el instituto y me dieron las notas y me dijo- cuando sepas las notas subes rápido a decírmelo, eh?- Yo en cuanto supe la nota de inglés fui a su clase y se lo dije y me dio un gran beso y un gran abrazo de amigo, que realmente me llegaron al corazón.
Y cuando supe mi última nota, historia, fui rauda y veloz. Subí. Él tenía clase, pero entré y se lo dije. Salimos a fuera, al descansillo, y su gran abrazo y besos fueron ALUCINANTES; como es él.
Nadie , antes, ningún profesor-amigo, había sido tan allegado conmigo, no se había preocupado por mi tanto. Nadie me había dedicado las palabras que me dedicó él en ese preciso instante, en ese instante precisamente....precioso.
Ante todo, y todos, darte las GRACIAS por todo lo que has hecho por mí, por haberte preocupado como lo has hecho, por apoyarme en todo, por esos abrazos y besos tan sentidos y por haber aprendido contigo una música que antes para mí habría sido desconocida.
Pero dejando a parte, el instituto, quiero decirte como amiga, que eres una GRAN PERSONA, que eres único por tu forma de ser, tu carácter tranquilo, tus historias, tu sabiduría y un largo etc.
A. GRACIAS POR TODO.
TE QUIERO.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario